El Certificado de Instalación Eléctrica (CIE), o Boletín Eléctrico, es un documento oficial que certifica que un punto de suministro cumple con todos los requisitos necesarios para el suministro eléctrico. Sería el equivalente a la ITV o la ITE de los edificios.
Tener un Certificado de Instalación Eléctrica (CIE) en vigor es obligatorio en toda España para cualquier instalación doméstica que esté enganchada a la red de distribución. Además, en algunas Comunidades Autónomas, como Canarias o Cataluña, cuando se realizan pequeñas modificaciones en la instalación pueden presentarse otros certificados de menor rango, y por tanto más baratos, como el CAI (Certificado de Adaptación de la Instalación) o el BRIE (Boletín de Reconocimiento de Instalación Eléctrica).
En líneas generales, el certificado hay que presentarlo cuando damos de alta la luz, cuando subimos la potencia contratada por encima de la PMA (Potencia Máxima Autorizada) que soporta la instalación, cuando cambiamos la actividad de nuestro negocio o cuando realizamos una obra que afecta a la instalación eléctrica. No obstante, Industria tiene transferidas estas competencias a las CCAA, y los requisitos por los que una instalación necesita presentar un CIE u otro certificado son diferentes en cada Comunidad Autónoma.
Es necesario tanto para la distribuidora de luz como para contratar con Alterna, y será necesario tenerlo disponible en los siguientes casos:
Para obtener el certificado de instalación eléctrica deberá acudir al domicilio un instalador autorizado que pueda aportar su sello oficial de calidad a tu punto de suministro.
Para que el CIE sea correcto, deberá contener una serie de datos mínimos:
Una vez que el instalador lo envía a evaluar, el documento debe pasar por un comité que puede aceptarlo o rechazarlo. Al menos dos entidades tienen que componer este comité para poder revisarlo de manera objetiva.
Si el boletín de instalación eléctrica es favorable, el periodo de tiempo estimado será de dos a cinco días. Si, por el contrario es no favorable, el instalador autorizado deberá subsanar la(s) incidencia(s) que después tendrán que ser inspeccionadas por la empresa certificadora.
Sí. Sea del tipo que sea el punto de suministro (un piso, un local, una comunidad de propietarios…), es necesario tenerlo. También será siempre requerido cuando haya que dar de alta un nuevo punto de suministro.
Tiene una caducidad de 20 años, así que, pasado este tiempo, puede ser requerida su actualización en el caso de querer realizar ciertas modificaciones (sobre la potencia o sobre la propia instalación eléctrica).
El precio del CIE no está regulado y, en consecuencia, depende de diversos factores. Principalmente, el coste total depende la tarifa del instalador eléctrico que escojas. El precio también varía en función de las dimensiones del inmueble a revisar. Por último, cada comunidad autónoma puede aplicar una tasa al registrar la calificación emitida por el instalador. Teniendo en cuenta estos factores, el precio puede variar entre los 100-200€.
Aconsejamos, no obstante, consultar y contrastar precios de varios instaladores para poder elegir el que más se adapte a nuestro presupuesto y a nuestras necesidades.
Para solicitar el Boletín Eléctrico, el usuario debe ponerse en contacto o bien con un electricista autorizado o con una empresa instaladora que realice la revisión eléctrica y, que por tanto, expida y selle el Certificado de Instalación Eléctrica.
La revisión de la instalación eléctrica, ya sea para un alta nueva o un alta de segunda ocupación, no suele superar la media hora de duración.